domingo, 3 de marzo de 2013

GÓTICA



Gótica.
No es una mocosa de esas tribus urbanas de cara blanca y ojeras pintadas, disfrazada de zómbi el día de ánimas. De esas que hablan siempre en primera persona, comenzando cada frase con un "yo, mi, me, conmigo"
Es una señora, una dama aguda, silenciosa y afilada, puntiaguda, alargada, que sobre arbotantes y aéreos botareles, se sustenta y el vestido que la rodea, no es coraza ciega, sino una leve gasa bordada de coloridos vitrales que la llenan de luz y de misterio.
Ha soportado con resignación largos y dolorosos inviernos esperando los mimos de escultores y canteros.
Majestuosa a través de los tiempos y de los cambios del mundo, se yergue hacia el azul del cielo castellano, sosteniendo entre sus torres la historia de la ciudad de Burgos.
A su alrededor danzan los rumores y las leyendas y se ocultan los dramas y las miserias de una ciudad provinciana que se aletarga hasta que el sol empieza a despedirse.
Algunos madrugadores asisten a los romeros que van de camino a Santiago, indicándoles la salida del dédalo hacia afuera de las murallas. 
Una ciudad épica de fábulas de guerreros y reyezuelos en tiempos del honor y la palabra, que un día decidieron construir un templo mayor que sus castillos y sus conciencias, a las que el pueblo alimenta y alaba.
Las dos altas torres se llenaron de campanas que llegan a los corderos que pacen en la vaguada, repicando de victoria o de peligros o para llamar a las almas que vagan descarriadas.
Ahora la Gótica, preside otros tiempos, una épica sin héroes que ganaran una batalla después de muertos, sin reyes con capas de terciopelo y sin guerreros. Ahora el pueblo sumiso dormita bajo su sombra helada.


6 comentarios:

  1. Sumisos dormitamos. Esperemos que no se enfade como en "La ciudad de Gran Rey" de nuestro amigo Óscar Esquivias.

    Bello texto propio de quien ha vivido bajo su sombra alargada.

    Besos

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  2. Se levanta con la cara lavada la alta dama, abierta en ventanales apuntados, acodada en contrafuertes, ceñida por capillas como miriñaques, coronada hasta el cielo límpido, sin héroes campeadores a la vista, dormidos habitantes a sus pies que un día de estos, bien pueden levantarse, despiertan muchos, lo sé, entre las calles que rodean a la señora se escuchan sus voces juntas, más firmes que el cántico de cien canónicos.
    Besito dominguero.

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  3. Es impresionante verla ahí cual nodriza de unos tiempos impensados para ella. Ella que nació como un alarde poderoso, una ostentación que amilanara al enemigo, a los aldeanos y hasta al cielo.
    Ahora es sombra para el estío, nido de soledades y vacíos...
    Prefiero admirar su gallardía, su belleza sempiterna, la excelencia de su porte a pesar de los pesares.
    Y a todo esto...
    Ni siquiera he estado ahí, ya ves!!!
    Es uno de los pocos lugares de la geografía española que aún no he visitado.No he de morir sin hacerlo.
    Besos.

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  4. Una ciudad presidida por una Catedral tan hermosa pero también tan visible, siempre está a su sombra...

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  5. Una gótica preciosa que no está vestida de negro sino de tiempo, una gótica mayor que resiste con fuerza el paso de los años y sigue tan guapa.

    Besicos.

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  6. Tuve el enorme placer de haberla visitado en persona y admirado la delicadeza de sus formas y la riqueza en su arte....

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