domingo, 30 de septiembre de 2012

El payaso que hizo reír a la luna

Era casi de noche y estaba solo en casa. Había pasado un buen rato instalando la nueva tapa del váter que había comprado en un bazar de bricolage. Le pareció que todo encajaba en su sitio y recogió las herramientas y la tapa vieja que acababa de sustituir.
No pudo evitar acordarse de un artista callejero, que repetía un número introduciendo su cuerpo en una raqueta sin cuerdas y saliendo airoso de lo que parecía imposible.
Calculó a ojo las medidas del agujero de la tapa y se la pasó primero por la cabeza  y con un esfuerzo repentino consiguió pasar el brazo izquierdo también, quedando encajada a modo de bandolera entre el cuello y la axila... demasiado angosto el agujero como para pasar también el hombro derecho...por lo que decidió sacarse la tapa siguiendo los pasos inversos, pero tal operación empezó a ser tan dolorosa como irreversible, el cuello, enrojecido por la presión cortante de la tapa, parecía más una berenjena y por muchas contorsiones del cuerpo, presionando y tirando de la tapa, aquello no se movía ni para adelante ni para atrás. Pensó que necesitaría ayuda para salir de tan aparatosa situación. Entonces se acordó de que tenía que ir a recoger a la niña al instituto, porque había ido, después de las clases, como animadora del equipo de fútbol del curso y no podía dejarla volver sola y de noche hasta la casa, además ella podría ayudarle. Ni siquiera tendría que salir del coche.
Pero conducir de esa guisa era patético, ya tuvo algunos inconvenientes menores para entrar en el coche con el brazo levantado y ese arnés cruzándole el cuerpo.
Antes de llegar, le pareció ver sonreír a la luna, y le devolvió la sonrisa más por vergüenza que por cortesía.
No tuvo que esperar...se escuchaba el algarabío de estudiantes, futbolistas y animadoras en el aparcamiento. Ella enseguida reconoció el coche y se acercó, traía la sonrisa de los vencedores...más en el amor que en el fútbol... ella, que siempre reía como el agua, cuando le vio atascado en la tapa del váter, como en una trampa de conejos; rió a borbotones, en cascada saltaban los lagrimones ...le pidió  ayuda, pero ella quería salir de allí y que nadie la viera con él, en esa absurda situación.
Ya de regreso a casa, se volvieron a cruzar con la luna y ella dijo en un intervalo entre dos hipos:
-Parece que la luna se ha reído.

sábado, 29 de septiembre de 2012

Llegó la tarde.







Llegó puntual, la tarde al mar.
En un día único como todos los días; único, como todos los demás.
El horizonte refulgente de luces doradas, levemente acolchado por nubes lejanas, esperaba recibir el medallón de oro al final de su carrera.
En la arena, los cuerpos inquietos esperan el momento azul de la penumbra, como heridos por los dardos ardientes del ocaso.
No hay palabras, solo miradas que se pierden donde el mundo se acaba, y efímeras huellas en la arena mojada.
Ella no ha querido venir, no le gusta la playa, ni la sal, ni la arena en los pies, ve sus dedos como croquetas sin hacer...ella busca la belleza en las cosas minúsculas, sin saber que la tiene tan cerca...con solo mirarse al espejo, busca respuestas simples para sus complicadas preguntas, intentando razonar a su manera... La línea azul del horizonte es aburrida, solo una línea que a veces ni se distingue entre los azules, y el rumor ronco de las olas puede llegar a aturdirla por lo incesante.
Pájaros negros detienen el vuelo y planean como siluetas de cometas al viento.
Ya en la noche, pregunta: "¿Tanto agua para qué? ...si ni siquiera se puede beber!
y siguió alimentando a los peces del acuario, sin esperar respuesta.




lunes, 24 de septiembre de 2012

Adoro tus mentiras, ya no podría vivir sin ellas, tan inocentes, tan bellas...

Adoro tus mentiras, ya no podría vivir sin ellas,
tan inocentes, tan bellas...
Sueño que son verdades, tus verdades,
mentiras a medias...
como cuentos de cuna
inventados por ti,
 para dormir a la luna.

No hay intención de engaño
solo de justificar cierta actitud...
tratando de no hacerme daño...
y presumir.
Yo no me atrevo a decir
que no creo en este amor...
porque no hay otro mejor
que el que cada día inventamos.

sábado, 22 de septiembre de 2012

Cambio de Estación

Otra vez el  otoño.Cuando ya lo había olvidado, después de tanta primavera y del rigor del verano.
Cuando las hojas caen y la naturaleza sestea. Cambio de planes, proyectos, viajes ... cerca del mar y el ecuador que separa las estaciones, donde el otoño no tiene mucho que hacer, donde el agua nunca duerme.

martes, 18 de septiembre de 2012

Nada

No se puede decir que poco a poco la NADA se fue llenando... porque desde el primer momento, en el mismo instante en que una partícula de materia entra en la nada; ésta se destruye y desaparece, como desaparece el silencio con la primera sílaba de la voz.
Cuando la NADA se rompe, lo hace con gran explosión, dando origen a infinitas partes de algo que lo llena todo. Quizás pudo ser éste el origen del Big Bang, de tal forma que la NADA sea lo que le precede y por tanto sea la NADA el origen de todo, lo que vive y lo inane. Hay múltiples y contradictorias teorías al respecto.
Se dice que solo la vida engendra vida, pero ésto, que es válido para los humanos y los mamíferos, empieza a cuestionarse a medida que se va fragmentando la vida microorgánica hasta llegar a la reproducción monocelular bajo determinadas condiciones físico-químicas.
La NADA es el eco del silencio. El vacío absoluto dispuesto a llenarse a costa de su destrucción.
 A medida que el universo se expande hacia la NADA, ésta se comprime preparándose para la próxima gran explosión y así en una infinita sucesión de expansión-compresión-explosión.
Puesto que de la NADA venimos y a la NADA vamos, debiéramos aprovechar al máximo esta oportunidad que nos da la existencia, inventando otros cuentos chinos sobre nuestro origen y sobre nuestro destino. para reírnos juntos de este, y otros disparates.


sábado, 15 de septiembre de 2012

El desterrado




La espada oxidada de lejanas batallas, las barbas al vuelo, cabalga el campeador al destierro.
Deja un cofre de piedras... preciosas, a sus hijas en un convento, su altivo corazón guerrero no acepta el desconsuelo.
Camina por los yermos páramos de Castilla, paga el precio de la osadía de enfrentarse al rey con la palabra.
Pocos y buenos amigos le acompañan por esos caminos de hielo, condenados a la misma suerte, sin pecado ni delito.

Los poderes castellanos, castigan a quien, en paz, se rebela, se celebran las derrotas para que lo perdido, no se pierda en la memoria.
Los poderes que abusan de los humildes, tendrán siempre una respuesta.
Más de mil cien años pasaron y un ejército de campeadores recomienza las protestas.
¿Cuántos irán al destierro? ¿Cuántos vencerán el miedo?
Cansados de ser ignorados, desoídos, maltratados ... sacan filo a sus espadas.


miércoles, 12 de septiembre de 2012

Prosa prosaica



Me he reído con ganas, a solas con un libro. El título es "La soledad de los números primos" de el joven físico-teórico italiano Paolo Giordano. Nos cuenta, con una prosa sin ostentaciones literarias ni figuras retóricas recurrentes, la relación entre dos estudiantes y los fantasmas que se generan  entre ellos a través del tiempo. Las descripciones detalladas de los personajes que intervienen y de las situaciones creadas, son muy imaginativas, dando coherencia y profundidad a la historia.
En un arrebato de despecho, Alice, una chica famélica que cuida constantemente la dieta, acepta una cena en casa del joven médico que conoce en el hospital donde está ingresada la madre de ella. Ël, Fabio, cocina un risoto con setas, tomates y berenjenas rellenos cuidando la mesa al detalle (muy a la italiana). Ella apenas come nada alegando que es alérgica a las setas, después de dos botellas de vino, Fabio saca el segundo plato del horno, A Alice casi le da un soponcio, imaginándose dos piezas enteras, " ... "dentro de su estómago,  como piedras en el fondo de un estanque"... "se armó de valor y tomó un bocado de berenjena reprimiendo las nauseas" y siguió comiendo despacio hasta que le entraron ganas de vomitar. "...A todo esto, él se lo había comido todo, mientras que a ella aún le quedaba el nauseabundo tomate relleno. No podía trocearlo e ir escondiendo los trozos en la servilleta sin que él la viera..." . Se acabó el vino y Fabio fue a buscar más. ..."No bien desapareció  Fabio, cogió el pringoso tomate con dos dedos y, teniéndolo bien lejos de la nariz para no aspirar más su olor, fue al baño..." ..." Examinó el gran tomate y lo echó tal cual por el váter donde quedó atrapado en el recodo..." ..."Alice tiró de la cadena, solo que, el agua, en vez de desaguar por el conducto, empezó a llenar la taza con un inquietante borbolleo. Retrocedió espantada, se quedó mirando como el agua subía y subía... hasta que de repente se detuvo. La superficie del agua temblaba un poco y dejaba ver en el fondo el tomate, encajado en el mismo sitio. Alice, contraída la cara con asco, cogió la escobilla y la hundió en el agua tratando de desalojar el tomate, pero éste no se movía ni a la de tres. Tiró otra vez de la cadena. Ahora sí que el agua desbordó la taza y empezó a esparcirse por el suelo..."
Una novela cuajada de situaciones hilarantes por lo que tienen de cotidiano y contadas con esta prosa tan prosaica tienen aún más de divertido.

martes, 11 de septiembre de 2012

CARICIAS






Hay caricias que se esperan y no llegan a la piel,
que se pierden en la intención y en el deseo
Caricias que demandan besos y ternura.
Hay caricias que abrasan en la sien,
con la mano enredada en el  cabello
que se aparta con dulzura.

Caricias que brotan del silencio,
Hay caricias profundas y oscuras.
Caricias que hablan al alma,
caricias de luna y de ámbar
de las noches en penumbra,
caricias a ciegas, que adivinen los dedos.

Caricias que se sueñan sin tocarse,
que erizan el vello, que hierven la sangre.

Caricias solo para tu piel,
inventadas por mis dedos.








Himno a la tierra

 Me preguntó una mujer americana, excepcionalmente culta, por la  ausencia de letra en el Himno de España y traté de explicarle que hubo algunos intentos de ponerle una letra, pero ninguno se adaptó a la música ni a las circunstancias. Entonces preguntó por el himno a Burgos, mi tierra natal, porque habiendo leído el texto de la canción, no conseguía entenderlo.
La tarea de traducción de las palabras de un himno no es fácil. No sé bien por qué se empeñan los autores en escoger palabras magnificentes, y parábolas intraducibles para dar un sentido épico y glorioso a todos los himnos.
En la tercera palabra del himno a Burgos me detuve... "la insigne grandeza ... de nuestro solar" ... ¿cómo explicar lo que sigue? ..."sus piedras sagradas que son fortaleza y escuela y alcázar y trono y altar"..." robusto poema, tallado en granito cual timbre glorioso de nuestro blasón."
No soy amigo de himnos, aunque todos los pueblos los tengan, ni del orgullo patrio, ni de otras formas de enardecer el sentimiento de ser los mejores.
El autor del texto, Marciano Zurita, reconocido representante del Modernismo literario en España, hizo lo que tenía que hacer cuando le encargaron la letra del himno a Burgos, la exaltación de una tierra vecina a su Palencia natal, adaptando el poema a la magnífica partitura del compositor burgalés Rafael Calleja Gómez ... y parece que, con estas imprecisas explicaciones, la joven americana dio por satisfecha su curiosidad, comprendiendo que la letra de todos los himnos es siempre exagerada, con el fin de transmitir un halo triunfante a los paisanos que lo cantan, aunque no entiendan lo que dicen.

sábado, 8 de septiembre de 2012

Es Extraño







Deja que el tiempo pase, no se detendrá aunque lo ignores, pero con él pasarán las angustias y el desasosiego.
Ocúpate de tu jardín, para que no crezcan abrojos de miseria entre las rosas y marchiten tu belleza.
No derroches energía enfrentándote contra fuerzas que tu no puedes controlar, espera, tienes tiempo, el futuro es tuyo y los malos tiempos no duran para siempre, y cuando se debiliten, será el momento de avanzar con resolución.
Respira, llenate de los aires  del océano, del incienso de los templos; de nada sirve correr, los tiempos de las prisas ya pasaron.
Sonrie, deja que la luz que te invade se refleje en las cosas y los astros.
Abre los brazos al viento, que se lleve la tristeza y los temores.
Ama y escucha con cariño cuando alguien tiene algo que decirte al oído.

miércoles, 5 de septiembre de 2012

secretos de amor

Pequeña ciudad urbana, de tres generaciones vivientes, a veces mezcladas por el amor o por  cercanos parientes. !Cuantos secretos guardan sus murallas y sus plazas!. Secretos de alcoba, de amantes compartidos en secreto, de romances imposibles a otros ojos, pero que abrasan en la penumbra y ante la inevitable coyuntura de los encuentros disfrazados de fortuitos, cuando se sientan a la mesa de la vergüenza y el disimulo, las esposas, los amantes, los mejores amigos, el cornudo, la niña impúdica, la madre infiel, el casanova, el tio duro sin escrúpulos y todos y todas saben y comparan en un silencio oscuro.
Pequeña ciudad castellana, de silencios calientes, donde se calla el delito de amar a quien no se debe, y quien no es cómplice es parte del crimen, donde no hay ausentes y si no nos reconocieran sería una orgía permanente. Pero sabemos quienes son los que prestaron sus brazos, las que ofrecieron sus senos y el tiempo que pasó entre el otro y yo, quien nunca fue mi enemigo, ni tan siquiera un competidor por tus encantos.
!Oh pequeña ciudad! o gran familia o quizás, una corte desgastada por las erosiones de eros. Aún suenan los céfiros entre tus labios y sus orejas, con suspiros de amor y rechinan los dientes de venganza.
Sentados frente a frente en la mesa de la vergüenza y el disimulo se hablarán de estrategias, de cálculos, de dineros, enfermedades o de fútbol y ellas parecerán interesadas en lo que a nadie le importa porque bien que conocen el tacto de las yemas de los dedos de ambos y de otros que todavía no han llegado, sus lenguas y su potencia viva.  Lo que todos están pensando.