miércoles, 8 de febrero de 2012

FUEGO




El fuego igual que atrae, espanta.
Precisa de la distancia, demasiado cerca abrasa como los besos,  de lejos te apremia su llamada.
Fuegos que se encienden con la mirada,
Fuegos fatuos que en el aire retroceden al aproximarse, como los horizontes.
Fuego de hogar y manta.
Fuego de labios en ascuas, que hacen de las venas azules, vapores magenta.
Fuegos que bailan.
Llamas verdes de azufre, danzarinas naranjas, lenguas vivas se elevan y se mezclan en el caos  de una coreografía improvisada.
Fuegos internos
Sin oxígeno ni aire, surgen a borbotones de las almas y los volcanes.
Dolientes fuegos.
Purifican brujas,vírgenes, diosas y mortales que se retuercen en un bosque de confesiones salvajes.
Fuego del rubicundo Apolo.
Extrañando las riendas de Faeton, se desboca el carro en el Olímpo sembrando la desolación.
El fuego tiene una carga dramática, mitológica, de fragua y martillo, de destrucción y nueva vida que resurge como Fenix entre las cenizas. Pero también es luz, calor y fiesta para chinos y levantinos, guardián en la noche y aquelarre de hechizos y buenaventuras, poder y símbolo de proezas y maratones.
Fuego humilde de una vela, "la única luz que se apaga sola".

7 comentarios:

  1. El fuego tiene la capacidad de hipnotizar, al igual que el amor cuando quema en llamas.
    Abrasador cuando hastía y regenerador cuando su deseo se intensifica.
    La luz que sola se apaga es la vida, mientra se agazape en nuestras manos, mantengámosla encendida.

    Besos, dulces.

    Gracias por lo de Mimusa, aunque sólo fuese un cumplido, valió el instante de leerte, supiste sacarle una chispa a mi dormido corazón, que aún ahora sonríe al recordar.

    Besos, más.

    ResponderEliminar
  2. Hola Spaghetti, paso a saludarte y a ver tus escritos. Quiero desearte qué Dios te bendiga!! Cariños desde Argentina. Tere.

    ResponderEliminar
  3. Solo quien tiene fuego en el alma, escribe como tú lo haces.
    Un besazo.

    ResponderEliminar
  4. Aquí y ahora añadiría yo aquello de:
    "El pueblo, el fuego y el agua no pueden ser domados nunca"
    Focílides.
    Mi interior me grita que ahí radica su belleza.
    Los levantinos adoramos el fuego cual meigas bailando un aquelarre,solo que nosotros lo hacemos alrededor de las Fallas,los petardos y las cordás.
    Aunque sea de origen andaluz, siento debilidad por este elemento mágico que junto al mar,son puntos de referencia en mi vida.
    Besos.

    ResponderEliminar
  5. Fuego, clamor de aurora en una pupila. Relámpago de bronce en los jardines solitarios, donde instante a instante se inventa el amor bajo la luz glorioso de las estrellas...
    Un enorme abrazo
    mj

    ResponderEliminar
  6. Horas contemplando una llama.
    La misma llama que nos consume por dentro, en espejo.

    ResponderEliminar