Hoy no te has reído, y sabes que es importante, como el comer. Todos los días comes, pero no todos los días ríes, y hoy es uno de esos días de ayuno de la risa.
Los que están contigo, saben que algo te pasa, pero saben también que es mejor no preguntar en estos días, y eso te hace sentirte solo, y por pensar que no preguntan, deduces que no les importas, pero eso no es cierto. Les importas y desearían verte reír para reírse contigo, aunque también tienen sus problemas.
Pregúntales tú. Casi sin querer, la conversación se irá animando.
Alguien dirá: Pero mira lo que está pasando! ... y es verdad! ... Y el enfado tan exagerado se irá convirtiendo en algo cómico por lo ridículo. Entonces volverá el calor y la risa porque en el fondo, nada es tan importante para hacernos sufrir.
Que fácil es la teoría, pero que dificil es la práctica!
ResponderEliminarNo es en absoluto un delirio, mi querido amigo. Es un sentimiento que abunda. Es lo que algunos llaman la angustia esencial. Y sí, tal vez la mejor manera de amigarse con ella cuando nos invade no es escaparle ni juzgarnos por sentirla, sino mirarla de frente y luego alzar la vista e intentar conectar con la de los demás, con ese mundo inmenso a nuestro alrededor que va mucho más allá de nuestro mundillo de dolor y sin risa y que sin embargo está incluido en él. Es así como todo sufrimiento cobra algún sentido y parce hacerse más llevadero o hasta insignificante al compartirlo con el de los demás.
ResponderEliminarUn abrazo!
Qué cierto es lo de esos días anodinos, faltos de alegría y de ánimo,tal vez como dices por la risa huida.
ResponderEliminarTambién es verdad que necesitamos la palabra,la caricia, la comprensión,pero sin atrevernos a pedirla...¿por qué?
No sé, son días que nacen cansados y nos arrastran sin un motivo definido,simplemente por pequeñas cosas que engrandecemos haciéndolas montañas de sufrimiento inútil.
Peeeeero, todo esto lo entendemos más tarde,en un instante preciso.
Yo siempre digo que se me pasa ese abatimiento, esa desolación incomprensible cuando un gesto fugaz,como una estrella,rasga la negrura que me viste ese día aciago.
Cualquier detalle es válido para que aflore una sonrisa y esa es la luz que llena todo de nuevo.
Te dejo una frase que me gusta mucho del Dalai Lama:
Considero una sonrisa como algo único en un ser humano. Una sonrisa es también una poderosa comunicación. Una sonrisa sincera es la expresión perfecta del amor y la compasión humanas.
Venga, te dejo una de oreja a oreja
:D
Y besos,faltaría más!
¿Cómo me enrollo, a que sí?
Ja,ja,ja
Fer tiene mucha razón en lo que dice. Tenemos que permitirnos tener días tristes y alegres.
ResponderEliminarDate permiso para todo porque todo pasa.
Un beso muy grande, grande.
No hay nada como una conversación y un abrazo a tiempo.
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