Oteo el horizonte desde la roca,
de inmensa soledad estoy abierto,
soy el océano, soy un desierto
soy el aliento fresco de tu boca.
Tu eres un oasis y una isla loca
¿cómo encontrarte en este desconcierto?
juego a la lotería a ver si acierto
pero eres el premio que nunca toca.
Con la esperanza rota abrazo al viento,
penetro en la noche de los instintos
sin encontrar respuesta ni alimento
perdida la huella en los laberintos
sigo la senda del presentimiento
mientras la luna acampa en sus recintos.
De todas las maneras, desierto, océano y aliento: ¡Qué lindas formas de ser!
ResponderEliminarotro soneto precioso
ResponderEliminarcon imágenes super resueltas
felicitaciones
abrazos desde Chile
Como dos seres imantados de frenesí
ResponderEliminarvamos directos a la colisión de nuestros versos.
Porque soy eese premio que nunca toca
y llevo más de un año bajo una sombra
rastreando tus versos
olisqueando la forma
en que escoges y colocas las palabras.
Leo todas tus entradas ...
Precioso.Me ha encantado.Cuánto da para escribir el desamor y cómo lo has transmitido de bien.
ResponderEliminarEnhorabuena!!